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Magdalena es también la Apóstola de la resurrección

 

 

Buenos días, feliz martes y muchas bendiciones.

 

Hoy celebramos la fiesta de María Magdalena, a quien el Papa Francisco llama Apóstola de los apóstoles: ella fue la enviada por Jesús Resucitado para anunciar la Resurrección a los Apóstoles. Reflexiono sobre el importante papel que Jesús le dio a esta mujer y sobre el papel de la mujer en la Iglesia de hoy. Doy gracias a Dios por todas las mujeres que me ayudaron a conocer mejor a Jesús y oro para que la Iglesia encuentre formas de dar a las mujeres el lugar que les corresponde en su ministerio y estructuras de liderazgo.

 

¡He visto al Señor! Este fue el mensaje de María: la Apóstola de la resurrección sólo puede ser un testigo, alguien que ya ha conocido a Jesús Resucitado. Miro mi relación con Jesús y pido la gracia de conocerlo mejor para poder llevarlo a otros desde la plenitud de mi corazón.

 

En Juan 20: 11-18 aprendemos que la noticia más emocionante de toda la historia fue anunciada a las mujeres que habían ido a la tumba de Jesús para completar los ritos funerarios. Jesús ya no estaba allí porque había resucitado de entre l@s muert@s tal como había dicho que lo haría. La resurrección es el punto fundamental de la historia humana. Todas las personas que eran justas en tiempos anteriores esperaban con ansias el momento en que sus pecados serían pagados y la maldición de la muerte se rompería. Todas las personas que han sido justas desde entonces han mirado hacia atrás a este evento como la seguridad de la promesa de que sus pecados han sido pagados y la muerte ha sido vencida.

 

El apóstol Pablo lo dejó claro en 1 Corintios 15: 17-19 que, sin la resurrección de Jesucristo, no hay esperanza. “Y si Cristo no ha resucitado, vuestra fe es vana; todavía estás en tus pecados. Entonces también los que durmieron en Cristo perecieron. Si hemos esperado en Cristo sólo en esta vida, somos l@s más dign@s de lástima de todas las personas”. Pero no somos personas dignas de lástima, sino personas envidiadas, porque como dice Pablo en el versículo 20: "Pero ahora Cristo ha resucitado de entre los muertos, primicia de los que durmieron". Nuestra esperanza no es un deseo, sino una certeza de confianza basada en las promesas de Dios. Cristo ha resucitado de entre l@s muert@s y nosotr@s también.

 

A través de la resurrección de Jesús, celebramos el gozo de su victoria sobre el pecado y la muerte. Es el principio básico de la fe cristiana. ¿Cómo me afecta la gracia de la Resurrección? Oro para poder acoger con alegría el mensaje de Jesús resucitado, creyendo en el poder de su presencia en mi vida.

 

Es increíble el cómo una mujer sola es la primera persona que se encuentra con el Jesus resucitado. Ella se convierte en la Apóstola de los apóstoles que estaban inmovilizados por el dolor y la desesperación. En un mundo que desconfía de las mujeres y su papel en la sociedad, Jesús le da el primer lugar en la tarea de compartir la Buena Nueva. La dignidad de la mujer está inmortalizada.

 

Jesús resucitado no deja que María se aferre a él, sino que la envía en una misión, diciendo a las demás personas que ha resucitado. ¿Qué siento que Jesús me envía a hacer después de mi encuentro personal con él después de su resurrección? Oro por la gracia de no ser sord@ a este llamado, sino estar dispuest@ a responder con generosidad.

 

Bendiciones,

 

Padre Luis +

Date news: 
Martes, Abril 6, 2021 - 13:30

Ministerio en el tiempo del Coronavirus (Covid 19): Prevenir, curar y acompañar

Ahora tenemos que darle forma a lo que algun@s han comenzado a llamar; La Iglesia en Casa. Aunque yo me sigo preguntando; ¿qué hacen quienes no tienen un hogar? Por esto a la misma vez, estoy declarando desde hoy en nuestra Iglesia Santa Cruz una jornada de cuaresma de oración, ayuno y leer la Biblia en el Tiempo del Coronavirus.

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