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¿Cuál es la roca sobre la que Jesús edificará su iglesia: la persona de Pedro o su fe?

 
Lectura: Y te digo que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia, y las puertas del Hades no la vencerán. Mateo 16-19.
 
Buenos días, feliz jueves y muchas bendiciones mi querida familia.
 
La pregunta clave en el Evangelio (Mateo 16:13-23) de hoy es “¿Pero ustedes quién dicen que soy yo?” A veces me pregunto si escuchamos esta pregunta como un examen del evangelio de Jesús. Estamos aproximadamente a la mitad del relato del evangelio de Mateo. Por lo tanto, tiene sentido que Jesús pueda reunir a sus seguidor@s y decir: “Ok, veamos lo que has aprendido, si realmente entiendes. ¿Quién soy?"
 
La mayoría de nosotr@s sabemos la respuesta correcta. Hemos leído la respuesta de Pedro. “Tú eres el Mesías, el Hijo del Dios viviente”. Sin embargo, el evangelio de hoy no se trata de dar la respuesta correcta. Esto no es una prueba. No se trata de lo que está en nuestra cabeza sino de lo que está en nuestro corazón. Se trata de lo que yace en el centro de nuestra existencia. Jesús les está pidiendo a l@s discípul@s que consideren qué es el centro de sus vidas. ¿Cuál es el eje sobre el que gira su mundo? No basta con dar la respuesta correcta. Deben convertirse y revelar la respuesta por medio de sus vidas, palabras y acciones. Esas cosas, las cuales, para Jesús, son fundamentales para una vida de discipulado.
 
Tod@s tenemos algún centro desde el cual vivimos. Las personas, las cosas y las experiencias tienden a convertirse en nuestro punto de anclaje, el centro de nuestra vida. Nos dan orientación y estabilidad. Nuestro centro orienta nuestra vida y la dirección en la que vamos. No solo da forma a cómo vivimos sino, lo que es más importante, en quiénes nos estamos convirtiendo.
 
Pedro hace bien aquí: se ha dado cuenta de quién era Jesús, y Jesús lo bendice. Pero este no es el final del viaje, porque cuando está bajo presión en la Pasión, niega que incluso conozca a Jesús. Pedro, sin embargo, entra en una nueva profundidad de relación con Jesús cuando admite su debilidad: sabe que ya no puede confiar en sí mismo, sino que debe depender totalmente de Jesús. Note cómo Jesús enfatiza que la fe de Pedro (y la mía) es un regalo de Dios. ¿Cuál es la roca sobre la que Jesús edificará su iglesia: la persona de Pedro o su fe?
 
¡Podemos consolarnos mucho con el comportamiento de Simón Pedro! Jesús vio el potencial colosal en este individuo volátil, emocional y generalmente defectuoso. Vio el núcleo sólido parecido a una roca sobre el cual construiría su iglesia.
 
La capacidad de creer que somos perdonados es crucial para nuestro crecimiento espiritual. Esta fue la diferencia definitoria entre Pedro y Judas. Judas no podía contemplar la posibilidad del perdón. Él, que había oído a Cristo decir que hay que perdonar setenta veces siete, no se atrevía a pedirle a Cristo que lo perdonara.
 
Jesús me hace esta pregunta hoy: “¿Quién tú dices que soy yo?” Esta pregunta me obliga a considerar lo que realmente creo. ¿Quién es Jesús para mí? ¿Qué creo de él? ¿Por qué soy cristian@?
 
Bendiciones,
 
Luis+

Date news: 
Friday, August 5, 2022 - 01:15

Ministry at the time of Coronavirus (Covid 19): Prevent, cure and accompany

Now we have to shape what some have started calling; The Church at Home. Although I keep asking myself; What do those who do not have a home do? For this reason, at the same time, I am declaring today in our Holyrood Church a Lenten day of prayer, fasting and reading the Bible in the Time of the Coronavirus.

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