Now we have to shape what some have started calling; The Church at Home. Although I keep asking myself; What do those who do not have a home do? For this reason, at the same time, I am declaring today in our Holyrood Church a Lenten day of prayer, fasting and reading the Bible in the Time of the Coronavirus.
Hay una diferencia entre dar limosna y compartir lo que tenemos
Lectura: En verdad les digo”, dijo, “esta pobre viuda ha echado más que todas las demás. Toda esta gente dio sus dones de su riqueza; pero ella, de su pobreza, puso todo lo que tenía para vivir”. Lucas 21: 3-4.
Buenos días, feliz lunes y muchas bendiciones mi querida familia.
En el evangelio de hoy (Lucas 21: 1-4) escuchamos la historia de la viuda. (Es útil recordar que el Evangelio de hoy es una continuación del Evangelio del sábado cuando Jesús estaba en el templo y los saduceos lo vigilaban a él y a sus enseñanzas). Jesús notó que la gente rica estaba poniendo ofrendas en el tesoro. Entonces notó a una viuda pobre que puso dos monedas pequeñas en el tesoro. Jesús se sintió profundamente conmovido por su amorosa generosidad. Comentó: “¡Esta pobre mujer puso más en el tesoro que todos los demás! Los demás dieron de su abundancia. ¡Sin embargo, esta mujer ofreció lo que tenía! "
A Jesús no le interesa cuánto da la gente a la Iglesia, las escuelas y otras organizaciones. Jesús busca generosidad de corazón, no simplemente "generosidad de billetera". Comparado con otr@s donantes, este regalo de la viuda fue una miseria. Sin embargo, lo poco que ella dio provino de su "deseo". Ella estaba luchando para llegar a fin de mes, pero dio libremente al tesoro del templo. Jesús elogió a la mujer por su amor y su generosidad.
A menudo, aquell@s de nosotr@s que tenemos más a nuestra disposición no apreciamos la riqueza que tenemos: comida en la mesa, una cama para dormir, ingresos suficientes para “llegar a fin de mes” y personas que nos aman. Hoy Jesús nos llama y dice: "Agradece las 'riquezas' de tu vida: comida en la mesa, un techo sobre tu cabeza y gente que te ama". Y Jesús también nos llama a ser conscientes de las muchas personas en nuestro país y en nuestro mundo que no tienen suficiente, ya sea comida, dinero, vivienda o empleo. Quizás hoy podamos compartir con las personas con las que nos encontremos y que puedan necesitar algo de tiempo, atención, recursos o cuidados. Nuestro tiempo puede ser una gran bendición para ell@s. ¡Y podemos encontrar que esta perdona también es una gran bendición para nosotr@s!
¿Con quién te identificas en esta historia? ¿Aquell@s que dan dinero casualmente que no echarán de menos en lo más mínimo? O l@s que dan de lo poco que tienen. Esto también puede incluir no solo dinero, sino también dar nuestro tiempo, energía y habilidades a l@s demás, incluso cuando estamos cansad@s o muy ocupad@s.
En resumen, hay una diferencia entre dar limosna y compartir nuestros bienes y buena fortuna con l@s que tienen menos, mucho menos que nosotr@s. ¿Te están pidiendo que des de ti mismo hoy? ¿Cómo impacta esta historia en mi vida? ¿Me desafían las palabras o la actitud de Jesús? ¿Podría haber algo de sabiduría en esta historia para mí? ¿Alguna vez me han desafiado a dar de una manera que fue muy difícil para mí? Habla con Jesús sobre cómo fue eso para tí. ¿De qué formas o áreas de mi vida me veo a mí mismo como "pobre" y como "rico"?
Bendiciones
Luis +
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