El Evangelio de Marcos retrata a Jesús como alguien que ve la vida como una celebración o para disfrutarla.

 
Lectura: Entonces les dijo: “El día de reposo fue hecho para las personas, no las personas para el día de reposo. Marcos 2:27.
 
Buenos días, feliz martes y muchas bendiciones mi querida familia.
 
En el evangelio de hoy (Marcos 2:23-28) los fariseos continúan criticando a Jesús. Jesús y sus discípul@s estaban caminando por un campo de grano y mientras caminaban, recogieron un poco del grano. Es posible que lo hayan hecho sin siquiera pensarlo. Sin embargo, los fariseos inmediatamente confrontaron a Jesús y le preguntaron por qué sus seguidor@s estaban haciendo algo que era ilegal en sábado.
 
Jesús responde tranquilamente a su pregunta recordando a los fariseos que cuando David y sus compañeros tenían hambre, David tuvo la audacia de entrar en la “casa de Dios” y comieron pan que solo los sacerdotes podían comer. También les dice a los fariseos que el sábado fue creado para los seres humanos, no los seres humanos para el sábado.
 
Como cristian@s, la mayoría de nosotr@s no llamamos a los domingos “sábado”. Sin embargo, en el mundo de hoy, para muchas personas el “domingo” se ha convertido simplemente en un día más de la semana. Para otr@s, el domingo simplemente puede ser un día en el que no tienen que trabajar. Dios puede no estar en sus pensamientos en absoluto el domingo. Sin embargo, mientras lee este comentario, ¡asumo que Dios es una parte importante de tu vida!
 
Entonces, pregúntate: ¿por qué vas a la Iglesia? ¿Vas simplemente porque se supone que debes ir? ¿O buscas el enriquecimiento espiritual? ¿Tiene una comunidad en la Iglesia que se preocupa y apoya? ¡“Ir a la iglesia” puede volverse automático! Puede que simplemente sea parte de mi rutina semanal. La realidad es que puedo estar físicamente en la Iglesia, pero no estoy realmente prestando atención a lo que está pasando justo frente a mí. ¡Mi cuerpo puede estar allí, pero mi mente puede estar a millas de distancia!
 
El reto es seguir recordando esta celebración de la Eucaristía, lo que está pasando en este espacio sagrado. Dios sabe que “vagamos”. Dios no pide mucho de nosotr@s. ¡Dios simplemente quiere que "despertemos" y estemos atent@s a Él y a Su sacramento durante los 40-60 minutos que estamos allí! Sin embargo, es posible que tengamos que recordarnos a nosotr@s mism@s "permanecer despiert@s" varias veces durante la Eucaristía. La pregunta es: ¿lo haremos?
 
En este breve extracto del Evangelio de Marcos, se presenta a Jesús como alguien que ve la vida como una celebración o para disfrutarla. En tu oración con esta historia del Evangelio, imagínate un retrato de Jesús como una persona más tranquila y alegre de lo que a menudo lo hemos retratado. Después de contemplar este retrato de Jesús, dile cómo te siente acerca de él siendo así, las formas en que lo disfruta y lo resiste.
 
Me pregunto, ¿a veces nos encontramos buscando seguridad ejerciendo demasiado control sobre la vida de otras personas (y quizás un control demasiado ligero sobre nuestra propia vida)? Por el contrario, tal vez podamos confiarnos a esa libertad que disfrutamos como hijos e hijas de Dios, hermanas y hermanos de Jesús.
 
Bendiciones,
 
Luis+