La Cuaresma es un tiempo para dar un paso atrás y examinar nuestras vidas.

 
Lectura: Ten cuidado de no practicar tu justicia delante de los demás para ser visto por ellos. Mateo 6:1a.
 
Buenos días, feliz miércoles y muchas bendiciones mi querida familia. Les recuerdo que hoy tenemos la celebración del Miércoles de Ceniza con una misa trilingüe a las 7:00 pm, presencial y en línea. Y de 9:00 am a 7:00 pm estamos compartiendo las cenizas para el camino.
 
Con el Evangelio de hoy (Mateo 6:1-6, 16-18) comenzamos el tiempo de Cuaresma. La Cuaresma es un tiempo para dar un paso atrás y examinar nuestras vidas. ¡La Cuaresma es un tiempo para arrepentirse! ¡Hoy es el día en que recibimos cenizas en nuestra frente (si vamos a la iglesia)! Las cenizas son un símbolo de la realidad de que salimos de la tierra y cuando morimos, regresaremos a la tierra. Las palabras que acompañan la ofrenda de cenizas nos recuerdan que somos “polvo”. Tendremos un final. moriremos, sin embargo, ese no será el “fin” de nosotr@s. ¡Viviremos eternamente (con suerte) con Dios!
 
Las palabras de Jesús en esta lectura pueden darnos ideas sobre lo que podríamos hacer durante la Cuaresma. Jesús advierte a sus discípul@s que no hagan buenas obras simplemente para que otr@s piensen bien de ell@s. Jesús quiere que sus discípul@s sean conscientes de su motivación por lo que hacen. Él quiere que hagan lo que es correcto o bueno porque desean ayudar a las demás personas, amar a l@s demás y hacer del mundo un lugar mejor.
 
Jesús no está principalmente preocupado por las acciones de sus discípul@s. Más bien, Él está preocupado por sus motivaciones. Jesús espera que sus acciones y decisiones fluyan del amor a Dios, el amor al Evangelio y el amor a las personas y al mundo. ¡El amor es verdaderamente todo lo que importa!
 
¿Con qué frecuencia nos detenemos y examinamos nuestras motivaciones? Es fácil pasar el día y simplemente ocuparse de nuestros asuntos. ¿Estamos preocupad@s por l@s demás o estamos demasiado preocupad@s como para darnos cuenta de las personas que nos rodean? Creo que la mayoría de las personas en el mundo quieren ser buenas personas. ¡La mayoría de las personas se preocupan por l@s demás y desean ayudarl@s!
 
Sin embargo, nuestras motivaciones no siempre son limpias y puras. A veces, ¿elijo hacer algo para que la otra persona piense bien de mí? ¿Voy a la iglesia porque es realmente donde quiero estar? ¿O asisto simplemente porque se supone que debo hacerlo? Cuando estoy cansad@, ¿ignoro a alguien que pueda necesitar ayuda? ¿Y si estoy de mal humor me desquito con otr@?
 
Supongo que tod@s nosotr@s hemos tomado algunas de las decisiones mencionadas anteriormente en algún momento de nuestras vidas. Sin embargo, si la mayor parte de nuestro tiempo y atención se centra principalmente en nosotr@s y nuestras necesidades, sería bueno reflexionar sobre nuestras elecciones. La mayoría de las veces, la fuente de nuestra felicidad está en las personas de nuestra vida. Con suerte, la mayoría de las personas que nos rodean nos traen alegría y amor. Sí, habrá momentos difíciles. Sin embargo, si el amor está presente, las dificultades pueden solucionarse. ¡Y en el día a día, es su presencia, amor y cuidado el mayor regalo que recibimos!
 
Que hoy seamos conscientes de nuestras elecciones y decisiones. Jesús también nos recuerda que seamos conscientes de nuestras motivaciones. ¿Por qué tomamos las decisiones que tomamos? ¿Fluyen nuestras decisiones del cuidado y la preocupación por l@s demás? ¿O suelo hacer lo que es mejor para mí? Tod@s hemos escuchado el dicho: “¿Qué haría Jesús?” Hoy podríamos experimentar una elección o un desafío a medida que avanzamos en nuestro día. Podemos hacer una pausa por un momento y preguntarnos cuidadosamente: ¿Qué haría Jesús? ¡Y luego quédate quiet@ durante 60 segundos y escucha Su respuesta! ¡Jesús responderá!
 
Bendiciones,
 
Luis+