Me buscarás y no me encontrarás

Buenos días, feliz martes y bendiciones. 

¿Qué quiere decir Jesús en Juan 8: 21-30 cuando dice: "me buscarás y no me encontra

rás"? Aprendemos, por un lado, que es posible buscar a Cristo en vano. Nuestro Señor les dice a los judíos incrédulos: "Me buscarás y morirás en tus pecados". Quiso decir, con estas palabras, que los judíos algún día lo buscarían en vano.

La lección que tenemos ante nosotr@s es muy dolorosa. Que un Salvador como el Señor Jesús, tan lleno de amor, tan dispuesto a salvar, se busque siempre "en vano", es un pensamiento triste. ¡Pero así es! Una persona puede tener muchos sentimientos religiosos sobre Cristo, sin ninguna religión salvadora. La enfermedad, la aflicción repentina, el miedo a la muerte, el fracaso de las fuentes habituales de consuelo: todas estas causas pueden derivarse de la religiosidad de una buena persona. Bajo la presión inmediata las personas pueden rezar fervientemente sus oraciones, exhibir un fuerte sentimiento espiritual y profesar por un tiempo para "buscar a Cristo" y ser hasta diferentes. ¡Y, sin embargo, todo este tiempo sus corazones nunca podrán ser tocados! Si eliminamos las circunstancias peculiares que les afectaron, y posiblemente puedan volver de inmediato a sus antiguas costumbres. Él o ella buscó a Cristo "en vano", porque lo buscó por motivos falsos, y no con todo su corazón.
¿Qué significa buscar a Jesús? Buscar a Jesús significa volverse a Dios, desear estar en una relación con él y venir a su presencia para su realización, fortaleza y ayuda. Pero antes de que podamos comenzar a buscarlo, Dios debe hacer algo primero en nuestras vidas. Porque si nos dejáramos a nosotr@s mism@s, nunca buscaríamos al Señor. Significa buscar su presencia. Desear una relación con él.

¿Sabes que también podemos buscar alegría en Jesús? En el libro de Romanos (15:13) Pablo nos dice: Que el Dios de la esperanza te llene de alegría y paz al creer, para que por el poder del Espíritu Santo puedas abundar en esperanza. Jesús ha traído alegría al mundo. Como sus seguidor@s, nosotr@s también podemos traer alegría al mundo compartiendo las buenas nuevas de salvación en Cristo y viviendo en obediencia fiel y segura a Él, sabiendo que Aquel en quien hemos puesto nuestra esperanza es ciertamente fiel.

En esta época del Coronavirus vamos a compartir alegría al mundo entero dando testimonio de la presencia de Jesús en nuestras vidas. Sonríe, estamos en victoria.

Bendiciones

Padre Luis +