El objetivo de Jesús es aceptar a las personas excluidas

Buenos días, feliz lunes y muchas bendiciones.

Hoy comenzamos la meditación sobre el Evangelio de Lucas, que se extenderá tres meses hasta el final del año litúrgico. El evangelio de hoy (Lucas 4: 16-30) habla de la visita de Jesús a Nazaret y la presentación de su propuesta a la gente de la sinagoga. Al principio la gente se asombró. Pero de inmediato, cuando se dieron cuenta de que Jesús quería aceptar a todas las personas, sin excluir a nadie, la gente se rebeló y quiso matarlo.

Urgido por el Espíritu Santo, Jesús regresa a Galilea (Lucas ‪4:14‬) con esta propuesta. Empieza a anunciar la Buena Nueva del Reino de Dios y va a la comunidad, enseña en la Sinagoga y llega a Nazaret, donde se había criado. Regresaba a la comunidad en la que había participado desde pequeño y durante treinta años. El sábado siguiente, como era costumbre, Jesús fue a la sinagoga para participar en la celebración y se puso de pie para leer. Elige el texto de Isaías que habla de las personas pobres, de las personas encarceladas, de las personas ciegas y de las personas oprimidas (Isaías 61: 1-2). Este texto es una imagen de la situación de la gente de Galilea en la época de Jesús. La experiencia que Jesús tuvo de Dios, Padre y Madre del Amor, le dio una nueva perspectiva para evaluar la realidad.

En el nombre de Dios, Jesús toma una posición para defender la vida de su pueblo y, con las palabras de Isaías, define su misión: (1) anunciar la Buena Nueva a las personas pobres, (2) proclamar la libertad a las personas cautivas. , (3) para dar vista a las personas ciegas; (4) para liberar a las personas oprimidas, y tomando la antigua tradición de los profetas, (5) para proclamar “un año de gracia del Señor”. ¡Proclama el Año de Jubileo!

Jesús se aplica a sí mismo las palabras de Isaías, que estaba cuidando a las personas pobres, enfermas y oprimidas. Al principio la gente lo acepta, pero luego le desagrada debido a que critica sus errores.

Este pasaje es un resumen de la vida de Jesús y por qué fue rechazado al final de su vida. Pero, además, en este pasaje bíblico, Lucas nos ayuda a comprender un paradigma de discipulado radical y de una iglesia radicales que Jesús prefiere. Es aquí donde aprendemos que el rechazo de las voces proféticas por parte de los suyos era un fenómeno común en el pasado y sigue siéndolo hoy. Este rechazo fue algo que Jesús predijo que también les sucedería a sus seguidor@s, simplemente por proclamar la visión de la vida de Jesús. Su visión de la vida era “llevar buenas nuevas a las personas oprimidas y excluidas con la palabra de Dios no para que se sometan o se resignen con esa opresión o explotación, sino más bien para que experimenten el proyecto de liberación de Dios que incluye la transformación personas, interpersonal y colectiva. Todo esto para que podamos traer el cielo a la tierra.

El objetivo de Jesús es aceptar a las personas excluidas. ¿Aceptamos a todas las personas o excluimos a algun@s? ¿Cuáles son las razones que nos llevan a excluir a determinadas personas? ¿Dónde están las voces proféticas en mi vida y en nuestro mundo de hoy? ¿Cuál es su mensaje? ¿Me inclino a aceptarlo o rechazarlo?

Bendiciones

Padre Luis +