Les he puesto el ejemplo, para que hagan lo mismo que yo he hecho con ustedes

Buenos días, feliz Jueves Santo, y bendiciones.

Juan (Juan 13: 1-15) es el único evangelista que menciona el incidente del lavamiento de los pies de los discípulos por Cristo; de ahí que parezca que este hecho tuvo poca importancia. Juan, sin embargo, lo presenta con tanta minuciosidad y cuidado, que no podemos dejar de creer que Cristo tenía la intención de enseñar una lección importante con él; porque después de su ejecución, exhorta a sus discípulos a observar este ejemplo y a lavarse los pies unos a otros.

Por eso, muchas personas cristianas todavía continúan con esta práctica. Hay personas, sin embargo, en este, como en otros asuntos, no comprenden el verdadero significado; están satisfechas con la mera observancia externa de la costumbre y, por lo tanto, no se benefician de ella. Por lo tanto, es necesario predicar sobre este hecho e instruir a la gente sobre su verdadero significado.

Jesús amó a l@s suyos, particularmente a sus discípul@s, hasta el final. Mostró esto de una manera notable, honrándoles lavándoles los pies. Por extraño que parezca, se suele considerar que esta escena tiene una conexión con la Eucaristía.

Les dice a sus discípul@s que, a menos que les lave, no pueden tener parte ni comunión con él. Tal comunión se produce en la Eucaristía. La purificación de ell@s está hecha, para que puedan estar completamente unid@s con él. Es el comienzo de algo más grande. La simple oración "Límpiame, oh, Señor" es útil. Jesús es Maestro y Señor a la vez, y debe ser considerado como tal. Pero también es un humilde servidor. Sus discípul@s deben ser l@s mism@s, sabi@s y siempre ayudar.

Jesús se enfrenta a su 'hora'. No se hace ilusiones sobre lo que le espera, sobre lo que implicaría "partir de este mundo". Pero todo su pensamiento es para sus discípul@s; quiere darles un ejemplo de cómo deben vivir: en servicio amoroso.

Jesús amó a su pueblo "hasta el final", sin límites. ¿Dónde pongo límites a mi amor por l@s demás? Jesús sabe quién es: de dónde viene, adónde va. Él está enseñando a sus discípul@s que su verdadera identidad es ser servidor@s unos de otras personas a su imagen. Pido saber qué necesito aprender de esta escena.

Juan el evangelista nos comunica lo que está en el corazón de la Eucaristía, no describiendo la acción con pan y vino, sino dándonos una mirada detenida al corazón de siervo de Jesús. Doy gracias humildemente por las oportunidades que tengo de estar al servicio de l@s demás. Oro para que incluso mis pequeños actos de servicio sean para el bien del mundo y para la gloria de Dios.

¿Qué aspecto del comportamiento de Jesús ha sido / es una inspiración para mí, para comportarme como él? "Para lavarse los pies un@s a otr@s"; ¿Cómo puedo ver este acto de Jesús como una invitación a mostrar amor de manera concreta?

Como Pedro, ¿en qué aspecto de mi vida tendría mayor dificultad para dejar que Jesús 'me lave los pies'? Al ser ofrecido su Evangelio para la liturgia del Jueves Santo, ¿ha cambiado, desafiado mi comprensión de la "Eucaristía"?

Bendiciones

Padre Luis +