La Iglesia es un hospital para personas enfermas como tú y como yo. La iglesia no es un museo de gente santa.

Lectura: Simón Pedro respondió: “Tú eres el Mesías, el Hijo del Dios viviente. Mateo 16:16.

Buenos días, feliz jueves y muchas bendiciones mi querida familia.

En el evangelio de hoy (Mateo 16: 13-23) aprendemos que cuando Pedro se siente movido a identificar a Jesús con el Mesías, Jesús lo felicita, por así decirlo, por haberse dejado inspirar en su respuesta por el Padre celestial: al fin su pensamiento se ha elevado al plano propiamente espiritual.

Jesús revela que está fundando una iglesia, una comunidad de fe y adoración, que los poderes del infierno no podrán vencer. Pero la comunidad siempre necesita liderazgo; ya Pedro (cuyo nombre se asemeja a la palabra "roca", según el idioma que se hable) se le confía la autoridad de atar y desatar, siempre asociado con un pueblo con el que el Señor ha entrado en un pacto.

Jesús me hace esta pregunta hoy "¿Quién dices que soy?" Esta pregunta me obliga a considerar lo que realmente creo. ¿Quién es Jesús para mí? ¿Qué creo de él? ¿Por qué soy cristian@?

Me siento con Jesús y trato de responder honestamente a cada una de estas preguntas. No me juzgo por mis respuestas, sino que hablo con Jesús y escucho lo que me dice. Si Pedro va a ser una roca, es porque ha encontrado la roca que es Jesús. Todos necesitamos cimientos sólidos y firmes para nuestra fe y para nuestra vida. Necesitamos escalones fuertes que nos guíen por la vida. Jesús es el camino y los escalones. En él no debemos temer por el futuro ni perder la confianza en el presente. Poder decir que Jesús es el Dios vivo es una gracia para atesorar.

Jesús cambió el nombre de Simón a Pedro y le dio una nueva asignación, como sucedió con el cambio de Saulo a Pablo en su misión a los gentiles. Jesús vio el potencial de Pedro para convertirse en la roca, la base sólida del edificio para la frágil comunidad de fe. Me pregunto, ¿eligió Jesús a Pedro por sus fortalezas o por sus debilidades? ¿Puedo aplicarme esta pregunta a mí mism@?

Recordemos que la Iglesia es la asamblea del pueblo de Dios. Es un hospital, para personas enfermas como tú y como yo. La Iglesia no es un museo de gente santa. Cada un@ de nosotr@s está llamad@o a ser la piedra angular de la edificación de las vidas de quienes nos rodean. San Juan nos dice en el Apocalipsis que cada un@ de nosotr@s recibirá un nombre nuevo cuando lleguemos al cielo. Hagamos todo lo que podamos para prepararnos, aquí en la tierra, para recibir con alegría ese misterioso nombre nuevo.

Bendiciones

Padre Luis +